Layana es un pequeño pueblo en la provincia de Zaragoza (Aragón) en el que tomamos medidas que ayudan a frenar el cambio climático y, por tanto, ayudan a cuidar del medio ambiente. Nos rodeamos de naturaleza: el monte, nuestro río, la zona de huertos por donde se dan los mejores paseos... ¡No queremos perder todo esto que tanto nos encanta! Y, para que las futuras generaciones conozcan todo tal y como es, prestamos especial atención al cuidado del planeta en nuestras decisiones.

Es por esto que desde el ayuntamiento hemos tomado decidido renovar nuestras instalaciones para reducir nuestras emisiones de CO2. Intentamos que nuestra huella de carbono sea la menor posible y estamos al tanto de las nuevas tecnologías que nos lo permitan.

Hace dos años, todo el alumbrado del pueblo se cambió por luminarias LED. ¿Qué resultado hemos obtenido? Hemos notado un ahorro económico en nuestro consumo energético y también hemos reducido las emisiones al reducir dicho consumo.

Contamos con placas solares en la parte superior de la zona cubierta donde se pueden prácticar deportes. No queríamos desaprovechar ese tejado que está expuesto al sol siempre que haga un buen día. Con estas placas se alimenta la caldera de las instalaciones del bar, que se encuentra justo al lado.

Hemos mejorado el edificio del establecimiento hostelero de nuestro pueblo para que, además de utilizar esta energía renovable, esté bien aislado y no haya pérdidas de calor.

Desde los ayuntamientos se pueden llevar a cabo buenas prácticas para cuidar lo que nos rodea, hay que tener en cuenta la sostenibilidad cuando tomemos decisiones. El ayuntamiento de Layana se suma a esta iniciativa para cuidar lo que nos rodea y conservar el planeta.